ALBERT PINYA
Artista plástico
NOMBRE: ALBERT PINYA
NACIMIENTO: Palma. Baleares. España. 23/06/1985
CIUDAD DE RESIDENCIA: Palma
OCUPACIÓN ACTUAL: Artista plástico
WEB: www.albertpinya.com
¿En qué momento empezó a interesarte el arte? ¿Hay algún otro artista en la familia?
Mi abuelo paterno era violinista. Desde los 17-18 años, cuando empecé a tener un poco de uso de razón y una cierta conciencia, comencé a hacer del arte mi medio de vida.
Si tuvieses que reflejar tu lenguaje artístico en un plato de cocina, cual sería el título y sus ingredientes.
Qué graciosa esta pregunta. Nunca me la habían hecho y me considero un poco foodie. Qué divertido. Pues mira, podría ser un plato típico del recetario tradicional mallorquín como la "Fava Parada". Es un plato de cuchara que lleva fideos gruesos, habas secas peladas, sobrasada y botifarrón, costilleja, papada, pies y oreja de cerdo, puerro, cebolla, ajo, tomates de ramillete, sal y pimienta. Me gustan los platos que combinan mínimo 6-7 ingredientes. Donde hay diferentes encuentros y sensaciones y vas descubriendo nuevos sabores. Como cuando miras unas de mis recientes pinturas, repletas de escenas y personajes interactuando.
Si tuvieses que hacer un duo artístico con quien lo harías?
Con mi camarada el pintor mallorquín Pep Girbent.
Con qué personaje histórico te gustaría cenar?
Con muchos. Pero con Camarón me hubiese gustado, especialmente, compartir alguna sobremesa.
Cuando empiezas un proceso creativo de un nuevo proyecto, ¿Qué sueles hacer? ¿Cual es tu punto de partida?
Cada proyecto tiene su propia identidad y los patrones de cada proceso van variando, dependiendo de las características de la propuesta. Este quizá sea uno de los esquemas que más me estimulen para trabajar. La idea de ser poco previsible.
¿Cuales son tus influencias?
Actualmente mis influencias están en todas partes. Desde la televisión hasta la poesía. Procuro absorber y nutrirme de todo lo que me rodea, de un modo descabellado.
Proyecto o pieza que recuerdes con cariño dentro de toda tu trayectoria.
Quizá sería el proyecto que realicé en el MAC-Museo de Arte Contemporáneo de Lissone (Italia), en 2017. Fue la primera vez que exponía de manera individual en un museo y también la primera vez que un museo adquiría una obra mía para su colección. Además, fui el segundo artista español en exponer en aquel museo. Anteriormente, lo había hecho Antoni Tàpies a principios del 2000.
¿A qué sitio irías a "desconectar" del arte durante unos días?
Desconectar del arte es imposible porque el arte es actitud y una manera de enfrentarse a la existencia. Sin embargo, sí que me iría a la isla de Ibiza durante los meses de octubre hasta abril para desconectar del frenesí y de la urbe.
¿Qué te traes ahora entre manos con respecto a tu trabajo?
Mi próxima exposición individual en la galería Martina Corbetta (Italia), a finales de año, con una selección de trabajos recientes. Algunos de ellos realizados durante el estado de alarma y el confinamiento. Y otros realizados junto al ceramista Català-Roig. Todo inédito.
RECOMENDACIÓN:
El nuevo disco del músico Joan Miquel Oliver "Les aventures de la nota la" y la exposición de Niño de Elche, en el Museo Reina Sofía, "Auto Sacramental Invisible. Una representación sonora a partir de Val del Omar".
Si tuvieras que describirte en una sola frase, ¿cuál sería?
És un verso del poeta mallorquín Jaume C. Pons Alorda. Está escrito en catalán. Pero creo que se entiende, bastante bien, en castellano. La vida és un festival: l'infinit fornicant amb l'eternitat.
¡GRACIAS ALBERT!